Origen
El vidrio es un material inorgánico duro, frágil, transparente y carente de una estructura cristalina desde el punto de vista cristalográfico, por lo que se le califica como amorfo. Se encuentra en la naturaleza, aunque también puede ser producido por el ser humano. El vidrio artificial ofrece una amplia versatilidad de usos, tales como ventanas, lentes, envases, botellas y una gran variedad de productos.
El vidrio se obtiene a unos 1500 °C a partir de arena de sílice (SiO2), carbonato de sodio (Na2CO3) y caliza (CaCO3).
A efectos del desarrollo de esta ficha, se ha distinguido entre los siguientes tipos de vidrio, ya que el tratamiento que se les da al final de su vida útil es muy diferente:
- Vidrio procedente de envases.
- Otros tipos de vidrio:
- Vidrio empleado en edificación.
- Vidrio laminado.
- Otros (vasos, copas, lámparas, monitores de TV y PC, etc.).
El vidrio constituye aproximadamente el 10% de los RSU municipales, pero su recuperación selectiva permite aún ciertos márgenes de mejora.
1.1. Vidrio procedente de envases
Cuando el envase de vidrio llega al final de su vida útil y es depositado en el contenedor verde, empieza el proceso de reciclaje. El envase será transportado a las plantas de tratamiento y valorización de vidrio, que tienen como producto final un vidrio tratado libre de impurezas, denominado calcín, con el que se alimentarán los hornos de vidrio para fabricar nuevos envases.
Es muy importante la correcta separación del vidrio por colores y del resto de impurezas (plásticos, etiquetas, etc.).
El reciclaje de vidrio contribuye directamente al ahorro energético en el proceso de producción del vidrio, ya que disminuye la temperatura de fusión y, consecuentemente, se reducen las emisiones de CO2 a la atmósfera. Asimismo, disminuye la cantidad de materias primas que se emplean en su fabricación.
Otras dos características redundan en favor del reciclado del vidrio. La primera es que éste se puede reciclar de manera indefinida, dado que no pierde ninguna de sus cualidades a lo largo de los sucesivos procesos de reciclado, a diferencia de otros materiales que van experimentando una cierta degradación que se va acumulando a lo largo de ellos.
La segunda, con los matices que más adelante se expresan, es que el vidrio que llega a las cadenas de reciclado se aprovecha en su totalidad, dado que no genera ningún residuo distinto de los plásticos, tapones u otros elementos extraños que, por desconocimiento o por error al deshacerse del residuo, aparecen en los contenedores de recogida.
En lo que se refiere al proceso del reciclado es importante conocer que a pesar de las numerosas campañas que promueven los gestores del vidrio reciclado para conseguir un comportamiento disciplinado por parte de los ciudadanos en cuanto a que utilicen el contenedor del vidrio exclusivamente para vidrio y no para deshacerse de otro tipo de desechos, la materia prima de la que parten dichos gestores para fabricar el nuevo vidrio reciclado viene acompañada de ciertas cantidades de productos extraños cuya presencia en el material de partida obliga a desarrollar procesos previos, en ocasiones complejos, de clasificación, acondicionamiento y limpieza del vidrio.
Sería conveniente abordar la conveniencia y necesidad de abordar trabajos de investigación tendentes a caracterizar estos materiales intrusos, residuos en la fabricación del vidrio a partir de vidrio reciclado, con objeto de articular, en su caso, posibles destinos para ellos en el ámbito de la construcción, y más concretamente, en la construcción de carreteras.
1.2. Vidrio empleado en edificación
El vidrio que proviene de la demolición de edificios responde a composiciones y características muy diversas y su recuperación es muy complicada, por lo que, en general, no se considera de forma específica.
1.3. Vidrio laminado
El vidrio laminado es fabricado por la unión de dos o más hojas de vidrio, unidas en sándwich por una o más láminas de polivinil butiral (PVB). El PVB es el polímero más comúnmente utilizado como lámina intermedia debido a sus exclusivas propiedades como son, adhesión al vidrio, elasticidad y resistencia al impacto.
Los parabrisas de los automóviles, por ejemplo, se fabrican con este tipo de vidrio.
1.4. Otro vidrio (vasos, copas, lámparas, monitores de TV y PC, etc.)
Como ya se ha indicado, hay una parte del vidrio que se recoge que no se puede reciclar para la fabricación de nuevos envases. Por otro lado, se puede hablar de un nuevo tipo de residuo, el electrónico (e-waste), en el que se encuentran, por ejemplo, monitores de PC o pantallas de televisor, que en muchas ocasiones acaban yendo al vertedero.
En la medida de lo posible, se debe evitar que estos residuos vayan al vertedero, por lo que cabe sondear posibles usos alternativos para estos materiales.
1.5. Residuo del proceso de reciclado del vidrio
Durante el proceso de reciclado del vidrio de envases, se produce un rechazo que se estima en aproximadamente un 6%. Por otro lado, existe un vidrio residual que no es valorizable en el mismo producto (como sí sucede en el caso de los envases), pero que sí se puede emplear para la fabricación de nuevos productos.
Sería conveniente estudiar la conveniencia y necesidad de abordar trabajos de investigación tendentes a caracterizar estos materiales con objeto de articular, en su caso, posibles destinos para ellos en el ámbito de la construcción, y más concretamente, en la construcción de carreteras.